Recientemente tuvo lugar el día mundial
contra la lepra, que nos recuerda que aún sigue existiendo. Cuando hablamos de
lepra, lo más importante que hay que saber es que es una enfermedad curable y
poco contagiosa, de diagnóstico fácil y que si se trata precozmente de manera
efectiva se pueden evitar sus terribles secuelas, ya que ocasiona lesiones
progresivas y permanentes en la piel, los nervios, las extremidades y los ojos,
generando parálisis y discapacidades que son irreversibles.
Nos hemos acostumbrado a escuchar y
utilizar la palabra lepra o leproso como sinónimo de algo negativo o
malo y cuando deseamos expresar sentimientos de aislamiento y marginación. Esto
ha hecho que se perpetúen los mitos y malentendidos relacionados con esta
enfermedad así como el estigma y la discriminación hacia las personas que la
padecen.
Desgraciadamente sí. Estamos en pleno
siglo XXI y todavía existen personas afectadas por esta enfermedad en el mundo.
Según la Organización Mundial de la
Salud (OMS), en 2012, se registraron 232.857 nuevos casos de lepra en todo el
mundo, 58 % de ellos en India.
En nuestro país se notificaron a lo largo de 2012, 9 nuevos casos de lepra, la
mayoría importados aunque también hay algún caso autóctono y tiene una
prevalencia de 56 casos en ese mismo año.
¿Qué
es la lepra y cómo se transmite?
Lepra (del griego '' lepi'', que significa escamas de un pez) es
una enfermedad crónica causada por la bacteria Mycobacterium leprae o Mycobacterium
lepromatosis. También se conoce con
el nombre de enfermedad de Hansen debido al
médico que descubrió su etiología. Puede afectar al ser humano a cualquier
edad, sin predilección por sexos, y debido a la lenta multiplicación del microorganismo,
con un periodo de incubación de entre 3-5 años, los síntomas pueden tardar en
aparecer hasta 20 años.
¿A qué afecta?
Principalmente existen dos tipos de lepra:
· lepra tuberculoide se
manifiesta por manchas en la piel con bordes bien definidos, o más frecuentemente
placas. Tienen una superficie seca, con textura irregular y de color rosado o
cobrizo. Los enfermos padecen alopecia y/o pérdida progresiva de la
sensibilidad al tacto, la temperatura y el dolor. Se pueden observar nervios
periféricos inflamados en las cercanías de la lesión. La OMS la engloba, junto
con otras formas de lepra, en la categoría de lepra paucibacilar.
· lepra lepromatosa se
manifiesta por manchas que se extienden por todo el cuerpo, de color brillante
y con bordes poco definidos. Inicialmente no produce alteraciones de la
sensibilidad, aunque en un grado avanzado provoca la amputación espontánea de
los miembros distales: dedos de las manos y de los pies y, en el rostro: cejas,
pestañas, nariz y orejas, constituyendo la facies leonina (cara leonina). La
OMS la engloba en la categoría de lepra multibacilar.
¿Cómo se trata?
Desde los años 80 se aplica un
tratamiento que consiste en la combinación de tres fármacos: dapsona,
rifampicina y clofazimina con muy buen resultado. En caso de intolerancia a la
clofazimina, se recomienda un régimen alternativo con dapsona, rifampicina y
etionamida o protionamida. La duración del tratamiento es larga, y oscila entre
al menos 6 meses para la forma paucibacilar y al menos 2 años para la forma
multibacilar. La tasa de recaída suele ser
muy baja aunque últimamente se ha incrementado. Esto puede deberse a varias
causas: reinfección (poco probable), inadecuada duración del tratamiento o mala
adherencia al mismo.
¿Qué es Fontilles?
Es una
asociación sin ánimo de lucro, fundada en 1902 con el objetivo de proporcionar
una atención integral a los enfermos de lepra, procurando su curación,
recuperación y reinserción en la sociedad. En 1909 abrió el sanatorio San
Francisco de Borja, situado en la Vall de Laguar (Alicante), que ha tenido un
importante papel en la erradicación de la lepra en España y que con los años ha
ido reconvirtiendo su actividad, siendo en la actualidad una referencia
ineludible en la lucha contra la enfermedad a nivel mundial. También se ocupa de
las personas o grupos sociales que padecen otras enfermedades ligadas a la
pobreza y de quienes sufren cualquier marginación social debida a la lepra o a
otro tipo de discapacidad física o enfermedad dermatológica que pueda afectar a
su calidad de vida. Os dejamos su página web por si os interesa: http://www.fontilles.org/
Un saludo