Las modas van y vienen y en el mundo de la salud no iba a ser menos. Desde hace unos años los alimentos con el apelativo de naturales, productos elaborados sin aditivos químicos ni sustancias de origen sintético, son considerados por gran parte de la sociedad mejores para la salud que los alimentos convencionales.
Esta tendencia ha sido potenciada y utilizada por publicitarios del sector, sólo hay que ver como en muchos anuncios de alimentos aparece la palabra “natural”. Todos recordamos al señor Punset vendiéndonos “Pan Bimbo 100% natural”. Otros ejemplos menos conocidos pero que seguro os sonaran son… “Lo natural sabe mejor” de Hero, “Lo natural es sano” de Santiveri, “Nos une lo bueno y natural” de Arga. Juegos de palabras no pueden faltar: “Que les guste tanto… es natural” de Nocilla, “Lo mejor por naturaleza” de Leche Pascual o “Tu lado más natural” de yogures Smöoy. Algunos anuncios incluso nos retan: “¿Te atreves a ser natural?” de Trina. Y por último, ¿qué es lo único mejor que lo natural? ¡Pues que va a ser, lo dos veces natural! “Binatural. Birefrescante. Bifrutas de Pascual”.
Está claro que lo natural vende más, pero ¿es en realidad mejor que los alimentos convencionales? Un reciente artículo publicado por la revista Annals of Internal Medicine puede aportar algo de luz sobre este tema. Muestra las diferencias entre la alimentación estrictamente natural u orgánica con la convencional. Comparó 17 estudios en humanos y 223 estudios de los niveles de nutrientes y contaminantes en los alimentos y concluyó que:
1) No se encuentran diferencias nutricionales ni patológicas entre la población que toma productos naturales y la que no. Es decir, la alimentación natural no es más completa nutritivamente, ni te hace más vulnerable a enfermedades.
2) Se detectaron pesticidas en el 30% de la población que se alimenta de forma convencional, aunque la cantidad encontrada está muy por debajo del límite tóxico.
3) Presentaron mayores niveles sanguíneos de fósforo en la población alimentada convencionalmente, pero siempre dentro de valores normales.
4) Hubo el mismo porcentaje de infecciones en ambos grupos de población.
En resumen, parece que los alimentos naturales son nutritivamente similares a los convencionales y que no te protegen de enfermedades. Aunque puede que estos alimentos reduzcan la exposición a pesticidas y a bacterias multirresistentes.
Yo por mi parte me voy quedar con la frase que una vez escuche: cuidarse y vivir de forma sana es mucho más fácil y barata de lo que nos quieren hacer creer.
Salud
No hay comentarios:
Publicar un comentario