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viernes, 9 de enero de 2015

Xerostomía o sequedad de boca

La xerostomía consiste en la sequedad de la mucosa bucal, generalmente como consecuencia de una disminución funcional o patológica de la producción de saliva. Se trata de un proceso que puede ser crónico o transitorio, y en ocasiones se puede complicar a otras patologías como caries dental o gingivitis (inflamación de las encías). La xerostomía dificulta el habla y la deglución, provoca mal aliento y dificulta la higiene oral, debido a que el flujo de saliva ya no arrastra las bacterias. La secreción de saliva es continua, aunque existen estímulos que puede variar dicho proceso, tanto cualitativa como cuantitativamente. La importancia de la saliva radica en que interviene en funciones tan importantes como lubrificar y humedecer los labios y la mucosa bucal, elimina restos de comida ayudando a la higiene bucal, y participa también en labores digestivas y antimicrobianas.

La prevalencia de la xerostomía en la población general es de un 10% y parece existir una relación lineal con la edad, siendo mucho más frecuente entre las personas mayores que en los jóvenes. Por el contrario, no parece haber diferencias apreciables entre sexos. Las causas que la motivan son varias aunque entre las más comunes se encuentran los fármacos, ya que algunos de ellos generan problemas en la salivación como efectos secundarios. Algunos ejemplos de medicamentos que producen sequedad de boca son:
  • antidepresivos tricíclicos
  • antiparkinsonianos
  • fenotiazidas
  • benzodiazepinas
  • antihipertensivos
  • anticolinérgicos
  • antihistamínicos
  • antipsicóticos
  • diuréticos
Algunas enfermedades como el síndrome de Sjögren, la artritis reumatoide, el lupus eritematoso sistémico, la esclerodermia, la dermatomiositis, la enfermedad de injerto contra huésped y la diabetes, pueden ocasionar xerostomía, además de algunos tratamientos como radioterapias de cabeza y cuello o el consumir marihuana. La deshidratación que aparece en los estados febriles, poliuria, diarrea, hemorragias, gastritis, insuficiencia pancreática, fibrosis quística, hipertensión arterial, polineuropatías, intervenciones quirúrgicas y en los déficit de vitaminas como la riboflavina y el ácido nicotínico también producen xerostomía. Situaciones comunes que afectan al sistema nervioso como el estrés, la ansiedad, la depresión o la anorexia nerviosa, también pueden producir xerostomía.

El tratamiento de la xerostomía con frecuencia sólo produce resultados parciales, los estimulantes de la saliva son poco efectivos y por ello se requiere recurrir a una serie de consejos prácticos:
  • restringir el consumo de café, refrescos con cafeína y bebidas alcohólicas
  • beber frecuentemente pequeños sorbos de agua a lo largo del día o incluso masticar pequeños trozos de hielo
  • cuidar nuestra higiene dental y efectuar visitas frecuentes al odontólogo
  • masticar chicle también ayuda a segregar saliva, aunque debemos recordar que éstos tienen que ser sin azúcar para evitar el riesgo de caries dental
La xerostomía se puede tratar también con sustitutivos de saliva artificiales, así como con fármacos entre los que destaca la pilocarpina.

De todos modos, antes de recurrir a ningún tratamiento os recomendamos consultar a vuestro médico o farmacéutico sobre ésta u otras cuestiones relacionadas.

Un saludo.

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