Bien entrado el verano y con el mes de agosto a la vuelta de la esquina, muchas familias ultiman los preparativos para disfrutar de unos merecidos días de vacaciones en los que disfrutar del calor, de la actividad sociocultural y relajarse.
Con el objetivo de disfrutar al máximo de este periodo de descanso, organismos, entidades y administraciones relacionadas con la salud y el bienestar facilitan año tras año unos consejos dirigidos a diferentes colectivos para hacer frente a las altas temperaturas y los efectos secundarios que éstas pueden causar a enfermos crónicos, así como una serie de recomendaciones para no olvidar que sus tratamientos “no cogen vacaciones” y recordar la importancia del correcto cumplimiento de su tratamiento.
La OMS define el cumplimiento o adherencia terapéutica como la magnitud con que el paciente sigue las instrucciones médicas, pero quizás la ya clásica definición de Haynes y Sackett sea más completa al definirlo como la medida en que la conducta del paciente en relación con la toma de medicación, el seguimiento de una dieta o la modificación de su estilo de vida coinciden con las indicaciones dadas por su médico; siendo por tanto el incumplimiento el grado en que no se realizan estas indicaciones. Seguir una prescripción, la adherencia terapéutica, es un proceso complejo que está influido por múltiples factores ampliamente estudiados, existiendo factores relacionados con el paciente, con el profesional, con el sistema sanitario, con la enfermedad y con los propios fármacos.
Uno de los posibles factores relacionados con el paciente puede ser las vacaciones. Así, las autoridades sanitarias insisten en la necesidad de continuar con el tratamiento de manera habitual en todas las épocas del año, lo cual incluye las vacaciones de los pacientes y de sus familiares, con el fin de no interrumpir el tratamiento y por lo tanto de asegurar la efectividad del mismo.
Y es que, según una noticia publicada por http://www.correofarmaceutico.com/, creencias falsas como que el calor baja la tensión o que las patologías respiratorias son propias del invierno provocan que los enfermos descuiden su medicación y aumenten las tasas de incumplimiento en verano.
En definitiva, es evidente que una adherencia terapéutica deficiente compromete gravemente la efectividad de su tratamiento y por lo tanto de su salud, por lo que desde nuestra unidad queremos recordarle la importancia de este hecho y le animamos a que siga correctamente su tratamiento incluso estando de vacaciones.
Un saludo y felices vacaciones.